"Cuerpo como brújula": Margarita Bali y el arte de moverse en el tiempo.
- Evelin Bottani.
- hace 4 días
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Por Evelin Bottani

En tiempos donde las imágenes se desplazan más rápido que las palabras, la danza insiste en moverse. Entre la velocidad de los medios, las mutaciones del lenguaje y el vértigo de lo global, el cuerpo todavía encuentra un lugar desde donde decir. Ya no solo en los escenarios tradicionales, sino también en otros territorios visuales: pantallas, proyecciones, entornos inmersivos o paisajes que laten.
La historia del movimiento en el arte reciente nos recuerda que el cine fue uno de los primeros en ofrecerle al cuerpo nuevos caminos. Pero más allá del encuadre cinematográfico, florecieron otros formatos. La necesidad de investigar, de ir más allá de los límites coreográficos conocidos, llevó a artistas como Margarita Bali a ampliar la frontera de lo posible.

Figura clave de la danza contemporánea argentina, Bali ha trazado desde hace décadas una obra inquieta, atenta al cruce entre cuerpo y tecnología. En esta ocasión, me adentré en dos de sus piezas que actualmente habitan el Palacio Libertad: Galaxias Inmersiva y Rocas. Una invita a orbitar en un universo digital donde los cuerpos flotan entre galaxias; la otra, a recorrer las orillas del mar junto a cinco bailarines que se enfrentan al peso del paisaje y del tiempo. Ambas, desde lenguajes distintos, nos interpelan con una misma certeza: que la danza, aún entre rocas o estrellas, sigue siendo un modo de pensar el mundo.
En Galaxias Inmersiva, el cuerpo ya no pisa el suelo. Se deshace de su peso, se libera de su eje y comienza a girar como un satélite danzante en una noche sin horizonte. Margarita Bali compone una constelación de imágenes en movimiento donde los cuerpos - filmados, editados, multiplicados - flotan entre nebulosas, chocan con estrellas, se diluyen en el resplandor de galaxias reales.

Es una danza suspendida en el tiempo y el espacio. Una coreografía expandida en luz y píxeles, donde lo humano y lo celeste se funden, se confunden, se espejan. No hay escenario: hay cosmos. No hay gravedad: hay deseo de expansión. La pantalla, en lugar de limitar, se vuelve portal. La danza, entonces, no se mira desde una butaca: se habita, se orbita.

En Rocas, la tierra vuelve a hacerse presente. Pero no como ancla, sino como pulso. Cinco cuerpos bailan en la costa, entre piedras húmedas y ráfagas de sal. Cada paso es una negociación con el paisaje: el viento que empuja, la arena que cede, el mar que insiste. La cámara no solo registra: acompaña, se moja, se hunde.
Aquí, la danza es resistencia. Es migración, memoria, metamorfosis. Hay algo antiguo en estos cuerpos que se entregan a la intemperie, y al mismo tiempo algo urgente, como si el mundo necesitara recordar cómo se baila cuando no hay escenario ni música, solo elementos.
Rocas, Margarita Bali
La música de Marcelo Moguilevsky - por momentos susurro, por momentos arrullo - acompaña ese tránsito, esa caminata existencial. Rocas no es solo una obra visual. Es un poema físico sobre la persistencia del cuerpo. Si Galaxias Inmersiva nos lanza hacia lo cósmico, Rocas nos devuelve al origen. Pero en ambas, el cuerpo es brújula. Es lenguaje sin traducción. Margarita Bali nos recuerda que la danza no es solo forma: es pregunta, es paisaje, es tiempo hecho movimiento. Entre estrellas y piedras, entre lo intangible y lo tangible, su obra hilvana una poética donde el cuerpo sigue siendo centro. Incluso en esta era de pantallas, sigue siendo el lugar desde donde mirar el mundo de nuevo.
Galaxias Inmersiva: Dirección: Margarita Bali. Edición de video: Margarita Bali. Música original: Gabriel Gendin. Espacialización sonora: Gabriel Gendin. Asistencia técnica de video: Agustina Piñeiro. Vestuario: Monica Toschi. Intérpretes: Elenco de bailarines Ballet Contemporáneo del Teatro General San Martín de 2013. Reedición especial 2025 para Sala Inmersiva: Alexis Miranda, Flavia Dilorenzo, Eva Prediger, Lucía Bargados, Silvina Perez, Juan Hair, Matías Mancilla, Matías Santander, Matías De Cruz, Vanesa Turelli, Victoria Balanza, Nicolás Miranda, Luciano Figueroa, Melisa Buchelli. Coreografía: Margarita Bali e intérpretes. Duración: 11 minutos.
Rocas. Dirección: Margarita Bali. Música original: Marcelo Moguilevsky. Bailarines: Carla Rímola, Ricardo Andres Baigorria, Carlos Osatinsky, Juan Salvador Giménez Farfan, Fernando Nicolás Pelliccioli. Coreografía: los intérpretes. Escenografía: Costas de Uruguay. Vestuario: Monica Toschi. Cámaras: Juliet Mc Mains y Wanda Lopez Trelles. Asistente de video: Agustina Piñeiro. Asistente de sonido: Gabriel Gendin.
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