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¿Qué harías si tuvieras serios problemas económicos que resolver con urgencia? Sobre "Chicas Buenas", la serie.
Por Laura García Racciatti
Estas tres mujeres, aparentemente ‘normales’, amas de casa, madres de familia, se lanzan a una aventura algo particular que las pondrá en riesgo todas las veces y, aun así, no podrán salir del enredo en el que ellas solas se involucraron.
“Chicas buenas” arranca con toda la adrenalina de un robo a mano armada que ellas mismas idean y llevan a cabo como una forma de resolver sus problemas económicos. Beth, ama de casa, madre de cuatro menores de edad, aburrida de su monótona vida, descubre que su marido, un exitoso dueño de un concesionario de autos, la engaña con su secretaria y, como si eso fuera poco, un mal manejo del dinero del negocio lo lleva a hipotecar la casa arruinando la economía familia. Annie, hermana menor de Beth, fue madre adolescente de una niña que hoy está entrando en la adolescencia y transitando una crisis de identidad de género. La menor de las hermanas está separada del padre de su hija quien tiene la intención de quitarle la custodia de la chica debido a la mala economía de la madre. Ella, a su vez, no sabe muy bien qué es lo que quiere para su vida ni con los hombres; en especial con el padre de su hija a quien no puede soltar después de la separación. Ruby, mejor amiga de Beth desde chicas, trabaja en una casa de comidas rápidas de donde es despedida por un malentendido con un cliente y ama a su esposo policía y a sus dos hijos. Su drama empieza cuando a su hija le descubren una insuficiencia renal y le ofrecen solo dos alternativas: una medicación súper costosa o el trasplante.
Todas, motivadas por diferentes problemáticas, empiezan a hablar acerca de la posibilidad de conseguir el dinero que necesitan de una manera fácil y rápida y surge la idea de asaltar un comercio. Después de mucho hablarlo como un chiste, empiezan a pensarlo en serio y planean hacerlo en el supermercado donde Annie trabaja como cajera. Una vez concretado el robo, se dan cuenta de que recaudan mucho más de lo que habían imaginado para resolver sus deudas, pero no todo saldrá como esperaban ya que un pandillero mafioso les reclama de la peor manera su dinero resultando una especie de socio del dueño del supermercado, con quien tenía un acuerdo económico. Esta situación las toma completamente por sorpresa y, a la vez, las compromete con el sujeto en cuestión que, a modo de saldar la supuesta deuda, las obliga a trabajar para él haciendo que estas tres mujeres de familia se conviertan poco a poco en criminales.
Esta es una historia que tiene la mezcla perfecta de humor y drama, romance, encuentros y desencuentros, nos muestra cómo Beth, Annie y Ruby se debaten entre volver a sus vidas ‘normales’ o seguir haciendo negocios con el pandillero para conseguir su propio dinero y ser independientes. En algún punto empiezan a tomarle el gustito a la adrenalina que les provoca enredarse en actividades ilegales y harán todo tipo de encargos por este peligroso “jefe” como trasladar dinero falso, descartar un cuerpo descuartizado o custodiar a un delincuente con una herida de bala. Pero, cuando se den cuenta de lo involucradas que están, intentarán hacer lo que sea necesario para desligarse del bandido y sus fechorías, incluso si eso significara otra acción ilegal a sus espaldas.
La trama es más que atrapante porque juega mucho con el suspenso, el uso de flashbacks para desarrollar temáticas puntuales de cada capítulo y que así el espectador pueda comprenderlo con mayor facilidad y lujo de detalles. Y la sensación es la de no poder despegarse de la pantalla para saber qué sucederá el próximo episodio. Cada personaje va evolucionando a medida que avanzan los capítulos de manera apasionante. A Beth la vemos en el pasaje de ser la esposa sumisa que no cuestiona nada de lo que hace su esposo a tomar las riendas de su vida, probando diferentes negocios propios entre lo lícito y lo ilícito. Annie es un personaje volátil; con los hombres, con sus decisiones y en la vida en general hasta que por azar comienza a analizarse y empieza a indagar en su interior para replantearse sus actos y defectos. Ruby es la más sensible de las tres y la que menos cambia, pero sí la que más reafirma el amor a su familia en cada paso que da. Y en cada misión que enfrenta junto a sus compañeras de delitos ella siempre estará pensando en qué dirá su esposo si se entera.
Más allá del entramado delictivo central que tiene como iniciativa esta historia, hay otros temas profundos que se tocan que nos permiten reflexionar y hasta identificarnos con uno de los personajes (y más también), entre ellos las dificultades que aparecen en los matrimonios prolongados y cómo se enfrenta a ellas; las crisis de los cuarenta en hombres y mujeres, el tránsito respetuoso hacia el cambio de género en niños y adolescentes, la violencia de género, los desafíos y la diversidad funcional en la infancia, y las amistades sólidas que se convierten en familia A todo lo mencionado se le suma una excelente musicalización resultando muy precisa a la hora de acompañar momentos de tensión como así también canciones ambientales y clásicos de la década del ochenta y setenta. Así que para los melómanos será un gran disfrute avanzar en la trama combinada con buenas melodías y letras que nos darán parte del mensaje que se quiere transmitir con el guion.
Para averiguar si logran desligarse de la delincuencia y volver a la vida que alguna vez tuvieron habrá que esperar cuatro cautivadoras temporadas con los nervios alborotados hasta los momentos culmines del episodio final.
Edit.: Mariné.
"'Chicas buenas'"
• Género: Comedia dramática criminal
• Duración de los capítulos: 43 minutos
• Idioma original: inglés
• Número de temporadas: 4
• Número de episodios: 50
• Canal de emisión: NBC, Netflix
• Período de emisión: 26 de febrero de 2018 al 22 de julio de 2021
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