UN REFLEJO DE LA SOLEDAD EN LAS FESTIVIDADES: Sobre "VEN A MI CASA ESTA NAVIDAD" de Sabrina Campos.
Actualizado: 3 ene
La ópera prima de Sabrina Campos Ven a mi casa esta navidad nos adentra en las horas que debe compartir Inés, protagonizada por Leonora Balcarce, con la familia política de su hermano, que está esperando un bebé. Inés tiene 40 años y está soltera, sin hijos, y un trabajo inestable en el ámbito del arte como lo denota su vestido amarillo opaco; un color asociado a estados de ánimos contradictorios como el optimismo o el paso a la locura (tal vez un refuerzo o metáfora de la inconsistencia de la vida en este personaje) y un sombreado de ojos esmeralda que nos podría estar indicando cuán independiente, racional y terrenal es.
En concordancia con esta singular y convencional trama podemos encontrar vestigios de una realidad impresionista, como la que imperaba en la perspectiva filmográfica de Agnès Varda. Una que admite concebir la fuerza del mandato social que, a su vez, se encuentra moldeado por una sociedad (mal) acostumbrada a exigirle a la mujer que retorne a una “naturaleza”, romantizada por su dedicación al cuidado doméstico. El argumento, finalmente, pone el acento en lo visual más que en lo narrativo y la respuesta es obvia…Leonora Balcarce se pronuncia.
La protagonista, que también estuvo bajo la dirección de Lucrecia Martel y Adolfo Aristarain, despliega una extraordinaria actuación basada en gestos y miradas acentuadas por la presencia de una cámara asfixiante que, a través de insistentes primeros planos a la vez, incisivos e incómodos, permiten entrever la tristeza y frustración que tiñen los diálogos prejuiciosos (como si se tratara de María Antonieta), cada vez que alguien intenta mantener una conversación con ella.
La noche se va (entre)cerrando y las motivaciones (pre)existentes en la vida de Inés van haciendo su aparición. Un vistazo por el retrovisor revela su complicidad con el público que observa y entiende que, por fin, vuelve a la casa para resguardarse en su compañía.
La soledad se acrecienta cuando el entorno que te rodea, en especial en las fiestas de fin de año, te hace dudar de las decisiones que van en oposición al común denominador no heteronormativo porque calan en la fibra más vulnerable y sensible del tan temido balance: “¿Cómo me fue este año?” “¿Logré lo que me propuse?” “¿Soy exitosa?” Así es como Inés, desde su frescura y transparencia por ser (¡vaya paradoja!) la “oveja negra”, confiesa que su trabajo se encuentra en un barranco y su “relación amorosa” consiste en estar pendiente de un mensaje por whatsapp en una suerte de rebose del emisor desprendida y magnánima.
Sabrina Campos, su directora, evidentemente, aprovechó su experiencia personal para darle un giro disímil con el que se suele identificar este festejo, como el amor romántico, encuentros gozosos, festejos y familias empáticas. Hay personas que, hace tiempo, deciden cuidar su salud mental y emocional, quedarse en compañía de quienes saben contener y comprender sin indagar en temas delicados y/o personales o, simplemente, quedarse en sus hogares disfrutando de un filme, como este que recomiendo.
Ven a mi casa esta Navidad (Argentina/2023). Dirección y guion: Sabrina Campos. Fotografía: Iván Gierasinchuk. Edición: Josefina Llobet. Elenco: Leonora Balcarce, Manuel Callau, Marita Ballesteros, Claudia Cantero, Mara Bestelli, Gabriel Fernández, Bárbara Massó, Guido Losantos, Isabela Terán, Valentín Wein, Alicia Labraga. Compañía Productora: Tarea Fina. Productor: Juan Pablo Miller. Jefa de Producción: Mariana Ponisio. Director de Fotografía: Iván Gierasinchuk. Diseño de Sonido: Catriel Vildosola. Montaje: Josefina Llobet. Sonido: Guillermo Pico. Directora de Arte: Marina Gurman. Vestuarista: Mariana Seropian. Maquillaje y pelo: Néstor Burgos. Género: Comedia dramática. Duración: 83 minutos. Distribución: Batata Films.
Fecha de estreno: 7 de diciembre